Vuestros hijos lo pasaron de "rechupete", ¡como disfrutaron! y que graciosos estaban con sus cascos y montados en las motos que nos trajeron.
La actividad consistía en dos partes:
-Teoría
-Práctica
Nos dividieron en dos grupos y mientras unos recibían su clase de teoría, los otros ponían en práctica aquello que aprendíamos.
En clase y a través de un cuento íbamos viendo por dónde se debe circular, peatones y vehículos, cuando y por donde cruzar, pasos de peatones, semáforos y saber con que color nosotros pasamos o cruzamos.
Con las imágenes del cuento entendíamos todo lo que nos iban explicando, las escenas eran claras y muy llamativas.
Los niños escuchaban y miraban cada una de las láminas que aparecían y luego preguntaban y contestaban a todo lo que se les iba diciendo.
Después de acabar nos subimos al circuito que nos habían preparado en la terraza y desde luego que aquí si lo pasaron en grande, participando de las dos formas que tenían que hacerlo de peatón y de motoristas, eso sí, con su casco imprescindible para poder montar en una de ellas.
Ya todos preparados para comenzar lo que realmente querían hacer, la práctica.
El momento de practicar ha llegado, peatones y vehículos están preparados.
Y por fin vamos a comprobar como se desenvuelven en su papel que les ha correspondido, los monitores se esforzaban por decirles como y por donde deben circular, donde pararnos y ante todo mirar a un lado y otro para no atropellar a nadie.
La actividad resultó todo un éxito y seguro que para el próximo curso lo podemos repetir, incluso aumentando el tiempo si es necesario.
Me encantan estas actividades, no solo se lo pasan bien también aprenden un montón.
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